18 de Octubre > 10 de Noviembre 2012
Matthias Reinmuth descompone en sus obras las reglas del tiempo y del espacio y nos sumerge en un estado
emocional, un nirvana de colores pastel. Su abstracción es onírica y lírica como sus telas compuestas de capas
sucesivas de pintura al óleo de colores lavados e irisados. Los pictogramas realistas - barcos, estrellas, animales,
bombillas - que aparecían antaño como por accidente en medio de sus telas se han disipado. Explorando las fronteras
de la abstracción, Reinmuth prácticamente borró los elementos narrativos, que en lo sucesivo se transparentan
apenas en mundo pictórico cada vez más intuitivo.
« ¿ Que vemos, cuando cerramos los ojos? ¿ Cuáles colores son los fragmentos visuales de la realidad en nuestras
memorias? »
El trabajo de Matthias Reinmuth puede ser visto como una adaptación tierna de su subconsciente o hasta de su
inconsciente, aunque no este concernido por los medios concretos del Surrealismo. La pintura de este antiguo alumno
de Baselitz visita la tradición del Expresionismo Abstracto y del Arte Informal de los años 50 y de los años 60, que
pusieron la expresividad emocional del color y la espontaneidad abstractà y lírica del acto de pintar sobre la tela al
centro de la confrontación artística.